Bájese en la otra
La mentira de los «defensores» de derechos y «luchadores» por la libertad.
Un sistema de segregación, discriminación, control y violación de los derechos humanos que se instaló con el aval de los soldados colectivistas como el Pit-Cnt, que permite que se violen derechos laborales de trabajadores por ejemplo, mientras su presidente si no está organizando marchitas políticas con bozal, anda reptando por pastizales caribeños lamiendo las botas de algún golpista militar, o en pedo manejando y chocando con autos estacionados.
Unicef Uruguay que teóricamente defiende con «convicción» la promoción de los derechos del niño y cuida de los más pequeños de todo el mundo (excepto del mundo) y que teóricamente, eso constituye la base del desarrollo humano. Se ve que para esta «organización sin fines de lucro», para un mejor desarrollo de los niños hay que experimentar con su cuerpo y someterlos a ensayos clínicos con drogas no aprobadas, hormonizaciones y tratamientos ideológico-quirúrgicos.
La Institución Nacional de Derechos humanos que creo que sólo defiende «Izquierdos humanos», ya que hizo caso omiso al reclamo de gran parte de los habitantes de este país y no ve delito alguno en las nefastas restricciones a la libertad individual y violaciones a la privacidad, como por ejemplo la divulgación de datos personales y la discriminación promovida como «estatus sanitario».
El carnaval y sus murgas y todos los «artissstas» locales que tampoco se pronunciaron en contra del «clasismo sanitario» y decidieron, como arlequines a sueldo, dar shows para los ciudadanos clase A (ciudadano con carné verde de buena persona)
El movimiento estudiantil siempre tan «combativo» y descerebrado, a tal punto que no les da la mente atiborrada de maruja y otras yerbas, para pelear por la libertad a no ser que sus líderes (operadores ideológicos zurdofilos amantes de asesinos totalitarios) se lo ordenen o se aburran porque se les cortó el WiFi o se les rompió la Play.
Los «libertontos» inmunizados contra el «Corona estado» con 4 dosis de «MileiZeneca » que no saben hablar de otra cosa que: «Libre mercado, menos estado y bla bla bla» mientras el mundo tiene problemas mucho más graves y sus líderes «Liberales» son los carceleros de las prisiones que construyen los magnates totalitarios.
Y podría seguir enumerando muchos «colectivos» como el 105 a Carrasco, el 185 cerro-cerro, el feminista, cannabico, afrodescendiente, los «nietos de inmigrantes», los de la Margarita deshojada «, el LGTBOPQRSTXYZ», los de la «olita», resentidos asociados, Mujeres de negro, de blanco o celeste, los legisladores, periodistas, médicos, comunicadores, los militares amigos de los Tupas, el ministerio de la verdad, los sacerdotes del nuevo código de proceso penal, el presidente proselitista- globalista y su claque, Metro-Goldwyn-Mayer el club de fans de la Pantera Rosa y la puta que lo parió.
Nunca antes había quedado tan claro que el individuo debe protegerse así mismo y aprender a pelear.
El individuo es la primera minoría. La mentira más grande y la idiotez más notoria, es creerle a los «defensores de las minorías» que se cagan en el individuo.
El colectivismo crea manadas, y las manadas no son buenas, porque matan o «violan en grupo»(¿o no?), son marcadas como ganado y llevadas al matadero, o simplemente conducidas al barranco.
Valéte por vos, no hay nadie que pueda representarte mejor que vos mismo. Las leyes y la Constitución son para el individuo, no para colectivos serviles al status quo.
Esteban Queimada